Blogger Template by Blogcrowds.

A veces te odio, me canso de llamar a tu puerta con mi alma echa trizas, ya no quiero escribirte más cartas inútilmente, ni enviarte mis palabras hechas canción. Estoy llorando con el corazón y con mi guitarra, mi única compañera, la única que hace menores mis penas, la única que aminora mi soledad. Sus acordes son la expresión de mi dolor, su melodía tu nombre, el rasgado de sus cuerdas es mi llanto contenido y emocionado y sus notas la voz que te suplica que vuelvas, que me grita tu nombre en medio de esta soledad, que me trae recuerdos de tí, que te dice que aun te quiero, que aun te espero y que si no vuelves no encontraré consuelo.



Y que sin ti me muero. Que no quiero esta vida si no escuchas el vibrar de sus seis cuerdas que lloran conmigo cada día si no te encuentran de vuelta.

Hay días en los que te odio, en los que no puedo verte y no puedo escuchar tu nombre pero en los que moriría porque me buscaras.

6 guarrindongos tienen algo que decir:

Me has puesto la piel de gallina. Los males de amor hacen sufrir. Pero sigue. No te rindas.
Un abrazo

17 de agosto de 2010, 21:43  

Tristemente romántico amigo.
Acompañada de tan bella canción... ainssss.

Un abrazo.

17 de agosto de 2010, 21:44  

Ayy esos amores que hacen sufrir!! y que por mucho que lo intentemos siempre están en la memoria.
Pero sabes? Tenemos que cerrar puertas para poder abrir otras.
No sé si es así, jajaj.
Venga te mando besitos y muchos ánimos que a todos nos hacen falta, no creas.

17 de agosto de 2010, 23:19  

Todo lo que se siente de forma intensa requiere un precio, el amor a veces duele y tú lo reflejas muy bien. Es muy bonito aunque un poco triste.
Besinos.

18 de agosto de 2010, 1:23  

La vida misma, nada es gratis ni siquiera el amor.

18 de agosto de 2010, 19:46  

Odio: qué palabra más fuerte,¿verdad?
Más fuerte es sentirla.
Un beso, amigo.

19 de agosto de 2010, 18:13  

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio