ÉL NOS PROTEGE
Hace 3 horas
Uno de los muchísimos recuerdos que tengo de la casa de mi abuela es de la música que a veces escuchaba. Ella era una mujer muy comprometida con la lucha contra las injusticias sociales, militaba en veinte mil sitios y organizaciones y nunca fue ajena a los problemas de los más desfavorecidos de la sociedad. Recuerdo cuando participó en una cadena humana contra una de las varias reformas que se han aprobado en España de la Ley de Extranjería o cuando bajaba a dar de comer a los obreros que se encerraban en los salones de la Parroquia de Santa Florentina, su parroquia, la de toda la vida, en los momentos difíciles de la crisis industrial de principios de los '90.
El caso es que le gustaba mucho escuchar a Mercedes Sosa, "la negra", una de las voces de Latinoamérica, por no hablar de la gran voz en singular, que no tuvo miedo a la hora de enfrentarse a la dictadura de Jorge Videla en su país, Argentina, sabiendo que habría de sufrir represión y exilio.
Hoy, la gran Mercedes nos ha dejado en Buenos Aires, legando a la humanidad hermosos cánticos que ponen los vellos de punta. Entre ellos, sin duda, el más conocido es este bonito canto a la vida, a la que, a pesar de los pesares, debemos siempre considerar como un don que se recibe, que se tiene que cuidar y que se debe comunicar (en palabras del burundiano Mikel Kayoya).
Gracias por esta música, querida Mercedes, por traerme a la memoria a mi abuela y también por haber alzado tu voz contra la desgracia humana ajena y la dictadura. Esa es la herencia que nos dejas, ¡bendita herencia!
El caso es que le gustaba mucho escuchar a Mercedes Sosa, "la negra", una de las voces de Latinoamérica, por no hablar de la gran voz en singular, que no tuvo miedo a la hora de enfrentarse a la dictadura de Jorge Videla en su país, Argentina, sabiendo que habría de sufrir represión y exilio.
Hoy, la gran Mercedes nos ha dejado en Buenos Aires, legando a la humanidad hermosos cánticos que ponen los vellos de punta. Entre ellos, sin duda, el más conocido es este bonito canto a la vida, a la que, a pesar de los pesares, debemos siempre considerar como un don que se recibe, que se tiene que cuidar y que se debe comunicar (en palabras del burundiano Mikel Kayoya).
Gracias por esta música, querida Mercedes, por traerme a la memoria a mi abuela y también por haber alzado tu voz contra la desgracia humana ajena y la dictadura. Esa es la herencia que nos dejas, ¡bendita herencia!
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Una gran desconocda para mi ...
Lo he leido en la prensa pero poco mas puedo añadir.
Gracias por la informacion JotaeFe!!!
Anónimo dijo...
4 de octubre de 2009, 18:31
DEP.
http://www.goear.com/listen/cb06724/zamba-del-emigrante-ismael-serrano-con-mercedes-sosa
R. dijo...
4 de octubre de 2009, 18:50
Hola JF, ya vez de nuevo estamos de acuerdo, y elegimos la misma canción, y eso que hay muchas que me gustan de ella. Anoche estuve mirando en directo por Internet la despedida que le están dando en estos momentos en Buenos Aires, y de verdad es emocionante. Que descanse en paz, ella se fue, pero sus canciones nos morirán nunca. Besitos.
Pepi dijo...
5 de octubre de 2009, 14:47
Hola Jota que tal?? te devuelvo la visita y ya de paso te comento que me quedaré un tiempo en tu casa, lo poco que he visto me ha gustado así que ahora no te queda más remedio que soportarme, jajaja. Pon una cervecita, no? no te parezcas a un tal Fete que es más agarrao el tío que un chotis.
Una vez quitado un poco de tensión y de pena debo decirte lo que he comentado en otro blog para mí era una gran desconocida aunque reconozco por lo que veo en la tele que tenía muchos seguidores, desde luego por ella, por su familia y por sus fans.... que descanse en paz.
David dijo...
6 de octubre de 2009, 18:21