La cuestión nuclear, o sea, lo del traido y llevado almacén temporal centralizado de residuos nucleares nos demuestra, una vez más y por si no lo teníamos suficientemente claro, que vivimos en un país de catetos, de jácara y de pito y pandereta. O sea, un país de mierda. Pero de esa mierda que huele hediondamente, a podrido, a estiércol. Tanto nos lo corrobora que me da rubor encender la televisión y escuchar las opiniones de la clase política que los españoles tenemos que padecer diariamente porque así la hemos votado y elegido. En el fondo, creo que es lo que nos tenemos merecido.
Se destapa la por mí llamada "gilipollez anti-nuclear" porque se buscan municipios candidatos para ubicar el almacén y, cuando el alcalde de Yebra se ofrece para albergarlo y dar así trabajo e inversiones a su gente y a la comarca, sale ufana la Sra. Cospedal -del PP y manchega de pro- y dice que Castilla-La Mancha ya ha hecho un esfuerzo nuclear muy grande en beneficio de toda España y que ya está bien, que ahora le toca la pelota a otra comunidad autónoma. Un ejemplo de solidaridad que me aturulla. Y lo dice y se queda impertérrita, como si tal cosa, orgullosa de su castellano-mancheguismo paleto y de haber luchado por una patria chica limpia y no nuclear. Y, para más inri, a renglón seguido señala que eso de que el almacén se lo queden otros es perfectamente compatible con la postura nacional del PP de que la energía nuclear es segura y de potenciarla o, al menos, no cerrar centrales nucleares hasta que otras fuentes de energía estén más y mejor desarrolladas. Y, como digo, lo dice y se queda tan pancha, sin una leve sonrisilla siquiera que delate que se está cachondeando del espectador, como tomándonos por estúpidos.
Y para demostrar que eso es compatible con la postura nacional del PP, va el partido y muy coherentemente le abre un expediente al alcalde de aquel pueblo, como si éste fuera un delincuente, como si no se pagara sus trajes o como si se hubiese llevado 500.000 euros de las arcas públicas municipales, cosa de la que se acusa presuntamente a otro alcalde que yo me sé.
Pero no contentos con eso, sube a la palestra otro alcalde, el de Ascó. Y dice que su pueblo también está dispuesto a ser la sede de dicho almacén. Y los de CIU, partido en que milita, le expedientan igualmente porque dicen que Cataluña no tiene por qué albergar ninguna instalación nuclear. Eso para otros que sean menos señoritos. El Presidente de aquella comunidad autónoma y sus miembros del Govern se enfadan por la misma razón, porque no quiere nnucleares dentro de los límites administrativos de las provincias catalanas, a pesar de que cuando el Sr. Montilla fue Ministro de Industria potenció la construcción del almacén del que ahora parece no acordarse. Una lástima, nos ahorraríamos escuchar imbecilidades.
Y yo me pregunto, señores políticos de todos nuestros partidos: ¿Las explosiones nucleares saben de fronteras? O sea, si el almacén de residuos se pusiera en Yebra, por ejemplo, y explotara un mal día, ¿solo afectaría la radiación a los habitantes con DNI y RH de Castilla-La Mancha, sin que llegasen sus efectos a los de Segovia, Madrid, Teruel, Murcia o Granada, por citar algunos nombres de provincias cercanas? ¿Y si se pusiera en Ascó, sólo recibirían la radiación y sus consecuencias única y exclusivamente los catalanes? ¿O bien se contaminaría un territorio mucho más amplio, a imagen y semejanza de lo que ocurrió en Chernóbil?
Me repatea este provincianismo cazurro, tan extendido en nuestra piel de toro. Y no deja de sorprenderme que sean dos pueblos "nucleares" -por su cercanía a centrales de este tipo- como Yebra y Ascó los que se hayan propuesto como posibles sedes de este almacén. Quizá sea porque la energía nuclear no es tan horrorosa como nos denuncia la televisión porque en Zorita de los Canes, que se sepa, la gente del pueblo no ha desarrollado tres cabezas, ni ocho piernas, ni los burros salen volando; así como las mujeres continúan pariendo niños y niñas, bien hermosos y rollizos, no monstruos, ni jorobados. No hay explosiones todos los días, las plantas son seguras y, mucho más, un almacén de este tipo. En los campos que rodean Zorita de los Canes, como digo, sigue habiendo cultivos, florecen las plantas silvestres y en las aguas de los ríos nadan peces de todo tipo y tamaño. Y a mí, que los he visto, me parecen más bonitos que los del estanque del Parque de El Retiro; esos sí que parecen peces mutantes, seguramente traídos de Chernóbil o de Hiroshima.
Sin embargo, habría que actuar con cautela…
La radiación es la radiación, y no perdona.
Un placer leerte.
Saludos.
Anónimo dijo...
28 de enero de 2010, 21:24
Por supuesto, no hay que frivolizar con este tema. Quizá yo lo he hecho en mi escrito, llevado por la rabia que provoca escuchar tanto catetismo en un par de días.
Hay que tomar decisiones bien fundamentadas y, sobre todo, no bajar la guardia por si se produjera un desastre irremediable que afectara a los manchegos o a los catalanes y a sus vecinos que somos todos nosotros.
Un abrazo fuerte.
JotaEfe dijo...
28 de enero de 2010, 22:40
Los partidos políticos a nivel nacional, de comunidad y provincial tenían que callar y dejar que los pueblos decidieran... y no es frivolizar, es simplemente que porqué no van a poder decidir su destino los vecinos... lo demás es simplemente las put.... elecciones que se acercan.
Un abrazo.
emilio dijo...
28 de enero de 2010, 22:52
EMILIO
Sí, se acercan malos tiempos. Hay que ponernes tapones en los oídos y hacer como que no se escucha nada porque esta gente cada vez es más insoportable.
Un abrazo fuerte¡
JotaEfe dijo...
28 de enero de 2010, 23:43
Manda webs!!..no se salva ninguno, lo malo es que nosotros tampoco nos salvamos de ellos...en fin
SaLuDoS MiL
Sylvia dijo...
29 de enero de 2010, 0:25
SYLVIA
Quizá si fuésemos menos conformistas, las cosas serían diferentes. No sé, yo ya estoy harto de tanto tonto/a.
Un beso.
JotaEfe dijo...
29 de enero de 2010, 16:02
Mira Juanito, no me hables de gilipolleces que estoy harta de ver tanto patio revuelto, de tanta memez y gilipolles, y es uqe no se de donde se las sacan todas,una peor que la anterior, ahora hay mas pueblos en riña, y cada vez mas imbeciles, lo que yo te digo, esto es una españa de panderetas y churros linguisticos y chorizos de politicos, chorizos, mentirosos e incultos, podría decir mas adjetivos calificativos pero de momento con eso voy sobrada, a ver lo que se les ocurre la semana que viene, otro pinganillo de esos, seguro, un abrazo,
amelia dijo...
29 de enero de 2010, 16:59
El miedo a las centrales nucleares me recuerda al miedo que algunos aún le tienen a los aviones. Está más que estudiado que es el medio de transporte más seguro y todavía hay gente que se mata en la carretera por no irse en avión (a destinos lejanos, claro). Con la energía nuclear pasa lo mismo. Es la más eficiente, y mucho más ecológica que las centrales térmicas de donde se extrae la energía a partir de combustibles fósiles, osea, carbón y zumo de dinosaurio. La energía solar es muy cara de desarrollar y la eólica es testimonial, aparte de que dependes de puntos específicos donde conseguir un máximo rendimiento. Hasta ahora lo más eficiente es la energía nuclear y está más que comprobado. Pero el tema es el qué hacer con los residuos nucleares, cuya radiación puede llegar a durar varios miles de años. Aparte de esto es que a nadie la haría mucha gracia ver de cerca un fallo en una planta nuclear. Si no recuerdo mal la nube tóxica que salió del fallo de la planta de Chernóbil llegó hasta Suecia pero, ¿alguno nosotros sabe si ha existido alguna otra catástrofe como esa? Hasta lo que yo se, no. De hecho, y corregidme si no estoy en lo cierto, ya existen medidas más que de sobra para localizar el más mínimo fallo en una estación nuclear de tal forma que así se puedan evitar males mayores.
Que conste que no estoy muy puesto a fondo en la materia pero hasta lo poco que me he informado es lo que he escrito aquí.
Otro problema es la dependencia que se ha generado durante años del zumo de dinosaurio y lo que unos pocos estados y empresas con las arcas hasta reventar de dinero del pueblo, nos obligan a depender de el, porque si no se les acaba el chollo que tienen con los consumidores. Que ahora está muy bien eso de los coches híbridos para ser ecológico y depender menos de la gasolina pero esa idea se materializó hace mas casi 100 años, si no más. Lo que pasa es que no interesaba...
Saludos a todos y perdonad si os he aburrido con este tocho.
Toño dijo...
29 de enero de 2010, 20:25
AMELIA
Sí, jajaja, no hace falta que sigas, no nos alteremos. Ya sabemos lo que tenemos y lo que hay y lo peor de todo no es eso, es pensar que quizá sea eso lo que justamente nos merecemos. En fin, un beso fuerte transatlántico, jajaja¡¡
JotaEfe dijo...
29 de enero de 2010, 22:13
TOÑO
Muy interesante tu escrito. Por eso digo lo que he escrito. Si, como creo, es una energía que da resultados, más económica que la térmica y controlada y segura, pues la verdad, no entiendo a qué viene tanto jaleo, tanto pandereteo barato y cateto. Claro que no es lo ideal, ni lo más maravilloso, pero las energías renovables cuestan mucho dinero y, como dices, su eficacia es relativa y depende de muchos factores, no se puede generalizar a todo el territorio de un país.
Lo que hay que hacer es evitar accidentes y problemas. Y cada vez que hay uno, todo se paraliza hasta que no se resuelve según las noticias de los telediarios.
Eso te lo dice uno que, mientras no sea por obligación, no se piensa montar en un avión, jajajaja. ¿No es más seguro el tren?
Abrazos¡¡
JotaEfe dijo...
29 de enero de 2010, 22:16